La perseverancia inteligente
La perseverancia es la capacidad para seguir adelante a pesar de los obstáculos, dificultades, desánimo, aburrimiento, frustración, o los propios deseos de rendirse. La persona perseverante termina lo que ha empezado, vuelve a intentarlo tras un fracaso inicial, persigue sus objetivos y se mantiene concentrada y trabajando en su objetivo.
Por el contrario, si nos vamos al extremo opuesto de la perseverancia, nos encontramos con personas perezosas y vagas, que se rinden demasiado pronto o que ni siquiera lo intentan, que buscan lo fácil y toman atajos siempre que pueden, pierden el interés con facilidad y abandonan ante la más mínima dificultad.
La perseverancia es algo que suele ser admirado por los demás. ¿Quién no sintió admiración por aquella corredora que, a pesar de estar exhausta, sin apenas poder moverse, siguió hasta cruzar la línea de meta, demostrando así un gran espíritu de lucha y superación?
En general, persistir ante el fracaso es difícil, puesto que el fracaso produce una emoción desagradable que hace que las personas deseen dejarlo y mirar hacia otro lado. La persistencia requiere vencer esta tendencia a abandonar lo que iniciamos.
La perseverancia, no obstante, también tiene un lado negativo. Al igual que ser demasiado poco perseverantes puede perjudicarnos, también puede ser contraproducente excedernos y seguir perseverando cuando ya no tiene ningún sentido hacerlo. Por tanto, una persona debe saber no solo cuándo perseverar, sino también hasta qué punto y cuándo es más inteligente abandonar y centrar nuestros esfuerzos en algo diferente.
Persistir en un objetivo inútil solo supone un gasto de esfuerzo y tiempo que no producen ningún resultado. Es preferible perseverar sólo cuando la posibilidad de éxito es razonable.
Muy reflexivo, para continuar pese a tropezar, no darse por vencido y considerar que poco a poco lo podemos lograr, tratemos de descubrir nuestras habilidades y encontrar que las debilidades si las enfrentamos, si trabajamos con ellas podemos fortalecerlas y por consiguiente lograr anhelos.
Ahora mismo estoy sintiendo la fuerza de la perseverancia, me doy cuenta que no debo abandonar un propósito cuando estoy cerca de alcanzarlo.
No debo desistir en esta meta que he estado postergando.
Este tema solo era una indagación del término perseverancia y para orientar sobre cómo practicarla, me digo a mi misma que es necesario que yo crea justamente en ella, que soy capaz, sin importar la edad ni el tiempo, es ahora y hoy, eltiempo apremia y hay que aprovecharlo, hay que despertar lo que está dormido y desarrollar la confianza hasta fortalecerse en perseverar en la búsqueda del éxito, sin importar el tamaño siempre será un éxito y ello produce satisfacción y bienestar.
Excelente descripción de esta habilidad natural del ser humano, te comparto un poco de mi personalidad en este tema específico, yo por ejemplo dentro de mis área de oportunidad es que «no veo límites» esto ocasiona que busque más allá de lo permitido, esto sumado a una increíble confianza en mí persona hace que min perseverancia sea elevada, pero como lo dije es un área de oportunidad que se ha convertido en Fortaleza Cómo lo logré definiendo objetivos claros y específicos y eso me lo dio la consultoría así he podido pasar de un área de oportunidad a una fortaleza.